lunes, 20 de julio de 2009

Atrapados

ATRAPADOS 1

Era una noche de verano en Bs As, pareciera que el verano incentiva a los enamorados, a la gente en general, aunque no este enamorada, hasta pareciera que los ladrones salen a robar con otra predisposición…..
Ella ya estaba lista para salir a estrenar el Fiat 128 tuneado que él se había comprado con el dinero que había juntado trabajando cada domingo durante los últimos dos años en la heladería de su tío.

Pasó por su ventana y golpeó tres veces, como solía hacer, a los dos minutos ella estaba besándolo en la puerta de la casa. Con apuro de adolescentes se subieron entre empujones y sonrisas en el Fiat.

Decidieron ir a tomar un helado a la heladería que estaba en una de las esquinas de la plaza, sin que se dieran cuenta el tiempo voló, estaban tan entretenidos besándose y descubriéndose más y más dentro del Fiat que no notaron que ya eran las cinco de la madrugada. La heladería ya estaba cerrada y no quedaba un alma en la plaza y sus alrededores. No lo hubieran notado de no haber sido por el golpe que sintieron en el vidrio del auto, alguien forcejeaba la puerta con mucha violencia y en cuestión de segundos la abrió. Fue todo tan rápido que ninguno alcanzó a reaccionar.

Era un pibe de unos 18 años, le dijo
:
- vamos rápido dame la plata, rápido, vos nena sacate esa cadenita, los anillos y vacia tu carterita, dale rápido.

Tenía una navaja en la mano. Le dieron los pocos billetes que tenían y con los ojos llenos de lagrimas ella le dió su bien mas preciado, una cadenita que la acompañaba desde los 6 años, era un regalo de su bisabuela a su madre.

El pibe agarró todo, la miró detenidamente y le ordenó a él que pasara al asiento de atrás.
- si llegas a moverte o a intentar detenerme la mato ¿entendiste?

Se desabrochó el pantalón, le subió la pollera a ella y la violó delante de él.
Al terminar le devolvió la cadenita y le dijo:

- No lo tomes como algo personal muñeca, sos demasiado linda, no pude contenerme, perdoname y se fue.

El estaba temblando, ella estaba petrificada, el no pudo superar nunca haber visto a su mujer sido violada delante de sus ojos y no haber hecho nada. Ella nunca pudo perdonarle que no lo hiciera, que no la defendiera. Los tres quedaron atrapados en aquél Fiat 128 muchos años.




ATRAPADOS 2



Ella no quiso hacer la denuncia de su violación, era raro porque su madre la había mandado a un grupo de autoayuda para que pudiera sacar afuera la bronca y encontrarse con otras chicas que hubieran pasado por la misma situación, sin embargo ella no sentía bronca hacia el pibe que la había violado.
Sentía bronca hacia su novio, porque estaba presente y no la había defendido, lo veía como a un cobarde.

Esa tarde salió de la terapia, caminó dos cuadras hasta la parada de colectivo, llegó a la parada y se paró detrás de un pibe que estaba esperándolo también.
El pibe se dió vuelta y le sonrió, pero esa sonrisa se transformó en cara de horror cuando la vió .Ella no pudo mirarlo con desprecio, solo recordó que el le había devuelto su cadenita de oro antes de irse, después de violarla.

- perdoname, por favor, desde el día que te hice eso no logro dormir, nunca en mi vida lo había hecho, solo robaba, pero no se que me pasó, me gustaste mucho y desde ese día no paro de pensar en vos, en cuanto te lastimé, en que merezco el infierno por esto.

Ella estaba inmóvil, muda, escuchándolo, tardó unos cuantos segundos en sentir que la voz le permitía hablar.

- yo te perdono
- mirá si querés vamos ya mismo a la policía y les contás que fui yo y listo.
- No, no quiero eso, ya te dije te perdono, no voy a arruinarte la vida, si es verdad lo que decís, si realmente fue la primera vez, tenés derecho a cambiar, a vivir tu vida, sos muy joven y yo no quiero cargar con la culpa de haberte truncado tus posibilidades de ser alguien mejor.
- Gracias, sos una buena persona además de ser hermosa, será por eso que me fije en vos.

De ahí se fueron a comer una hamburguesa y se quedaron charlando un largo rato.
Decidieron que ese sería su secreto.

Al mes ella cortó con su novio, al otro día estaba saliendo con el pibe que la había violado, se habían enamorado.


ATRAPADOS 3


Estaban juntos desde hacía un año, se amaban, contra todas las leyes de la lógica, ella había perdonado a su violador y se había enamorado de él, respetaba su pacto. Nunca le contó a nadie, ni siquiera a su amiga del alma, que su novio, el pibe por el cual moría de amor , la había violado una noche de verano frente a su novio de entonces.

Estaban planeando irse a vivir juntos, alquilar un departamentito lejos del barrio, para terminar de alejar a los fantasmas que aún los perseguían.
El hacía un esfuerzo sobre humano por complacerla, realmente quería cumplir con su promesa, cambiar, terminar la secundaria para poder estudiar en la universidad, no tomar mas cerveza o lo que fuera a cualquier hora, no juntarse mas con sus amigos a fumar marihuana o lo que fuera. Por un tiempo lo consiguió, aunque internamente dos fuerzas opuestas se disputaban la razón noche y día. Peleaban entre lo correcto y la perdición, entre el honor de un hombre por cumplir una promesa y su instinto totalmente opuesto.

Era verano nuevamente, ella estaba preparando un final y él decidió salir a dar una vuelta, a tomar un poco de aire, le dijo.
No tardes, le dijo ella, me siento sola cuando te demoras.
El cerró la puerta fuerte y salió, ella sintió que algo no estaba bien, los fantasmas volvían una vez más.

El caminó sin parar, rápido, como queriendo contener algo que irremediablemente saldría de su interior.
Caminó, dió varias veces vuelta a la plaza, fumó, se compró una cerveza y justo cuando estaba dispuesto a volver a su casa, vió a media cuadra de la plaza, en uno de los pasajes mas oscuros que la rodeaba, un Fiat 128 con los vidrios empañados, que se hamacaba con el sutil movimiento de dos enamorados.

Se levantó, ya su cara era otra, ya su mirada era otra. Caminó hacia el Fiat, a mitad de camino se dió vuelta y como si alguien lo empujara volvió a darse vuelta y fue directo al auto.

Sacó su navaja del bolsillo, forzó la puerta, ordenó al muchacho que pasara atrás, no hizo falta subirle la pollera, ya la tenia subida, la violó con una ira irrefrenable, una ira contenida que salió con la fuerza de un huracán.
Después salió corriendo. Le había prometido a ella no volver a hacerlo jamás, cambiar, pero ciertas cosas no se pueden prometer.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Mari me encanta como escribis,
como jugas con cada personaje,
la facilidad que tenes para invertir roles
y la fluidez que tienen tus relatos.


te quiero mucho
te felicito

Daiana

valeria dijo...

Siempre es interesantísimo explorar personajes que son a la vez buenos y malos. Esa lucha interior, esa tensión entre el ser civilizado y el salvaje.

Alfajor De Frutas dijo...

Yo sin querer leí primero atrapados 3 y después los otros. Fue interesante tabmién, hubiese sido mejor que halla leído primero el 1, pero también fue interesante verlo al reves. Me gustó mucho, me gusto que hallas contado que la protagonista le tenía más bronca a su novio. Me encantó como presentaste al violador, porque si bién no esté a favor de las vioaciones, los violadores son personas finalmente, quizas sea solamente yo, pero uno tiende a ver como malvados a personas que cometen actos similares.